Este romance atemporal
nuestro
donde caben
océanos y ecuadores
chiles y cordilleras
chiles y cordilleras
no lo detiene nadie
la raíz cuadrada
de la masa anónima
la sacamos
y acallamos la memoria
la sacamos
y acallamos la memoria
Nada detiene
mi calzón felino
elástico eros
comprado a luca
en el mercado Persa
Nada se acerca de puntillas
a calles no contaminadas
tarareando
melodias aguarosa
coqueteo con látigos de cuero
con palabras listas
para el asalto
En tu primera llamada de celular
algo me detiene
los ojales de mi blusa
parpadean cuando
tus versos me atrapan
se meten en mi sangre
y con ellos
y a pesar de ellos
ese
espasmo de placer dorado
Dejo de escucharte
y empieza otro poema
en la cocina
* David Silva Mexico